Pocos recordaremos la participación de este personaje en las películas de Harry Potter porque apenas tuvo una participación menos de 5 minutos, pero en los libros cobró un papel muy relevante.
Las películas de Harry Potter han sido objeto de inmuerables críticas tanto a favor como en contra. Si bien marcaron toda una generación, y hasta se podría decir dos generaciones -y es al día de hoy que aún siguen transmitiendo esa magia- cabe muy relevante indicar que también su adaptación ha sido muy critica en inmuerables oportunidades en virtud a que muchos personajes importantes dentro de la historia han sido eliminados con el objetivo de reducir tiempo de duración en la pantalla grande.
Tal es el caso como el de Peeves, el famoso poltergeist bromista que habitaba en Hogwarts, y que la eliminación total en la participación de las películas fue motivo de gran enojo por parte de los fans, donde estos solo pudieron llegar a conocerlo a través de los libros, y no en sus adaptaciones cinematográficas.
Pero esta nota no hablará sobre Peeves, sino de otro gran personaje que formó parte de la historia y fue completamente olvidado en las películas. Nos remitimos a la historia de Stan Shumpike, "el hablador".
El personaje apenas tiene una pequeña participación de escasos minutos en la tercera entrega, Harry Potter y el Prisionero de Azbabán, donde gracias al director Alfonso Cuarón permitió que participara de su historia y fue que pudimos al menos conocer sobre este personaje.
Stan Shumpike en la tercera entrega aparece como el cobrador de tickets del autobús noctámbulo, un vehículo de emergencia cuando un mago o brujo era abandonado por su familia. Este se encuentra con Harry Potter cuando huye de la casa de sus tíos tras inflar a su tía Marge. Si bien Stan nunca fue un mortífano, y tampoco tenia la marca tenebrosa, el solo buscaba cautivar a la gente contando historias falsas para sentirse relevante, más que nada al género femenino. Es por eso que en la gran fuga de Azkaban, los mortifagos lo encuentran, lo capturan, y lo reclutan bajo la aplicación de la maldición Imperio.
Es así como Stan termina del banco de Lord Voldemort y es de vital importancia su participación en los tramos finales de la película ya que él es quien en la batalla de los siete Potter, Stan descubre cuál Potter era el auténtico, luego de que Harry lo desarmara con el hechizo Expelliarmus